La importancia del perdón

Por Vanina Lucci.

Todos cometemos "errores" mientras vivimos en este planeta-escuela. Los errores generan caos interno, y como decía Einstein " del caos nacen las oportunidades..." Está en nosotros aprovechar o no esa ventana de oportunidades que se nos abre para que podamos aprender acerca de nosotros mismos, mejorar, pulirnos para brillar interiormente con mayor intensidad.
Mientras el proceso de aprendizaje está en marcha, es muy difícil recordar que esa persona que nos causa daño, en realidad es un maestro en nuestro camino, un amigo que se presta para crear con vos la escenografía necesaria donde se desarrollará la experiencia que enriquecerá a ambos... o no. Es fácil caer en el rencor y encerrarnos en nuestro virtual papel de víctimas, bloqueando así el proceso de aprendizaje.
Por mi vida pasaron ya infinidad de grandes tiranos; hoy ya cicatrizada, agradezco el papel que cada uno tuvo en mi obra, cada herida recibida no hizo otra cosa que aflorar partes de mi misma que necesitaban ser vistas, reconocidas como propias, abrazadas y trabajadas con amor, humildad y paciencia. El proceso fue largo y doloroso, requirió mucho coraje de mi parte, porque a nadie le gusta reconocer y abrazar a su propia sombra, esa parte que averguenza, que la sociedad te enseña a reprimir desde la infancia, esa parte que se esconde pero que existe dentro de cada uno (orgullo- desprecio- arrogancia- crueldad- sadismo- celos- envidia- rencor- egoísmo- avaricia- desamor); pero como dijo Paton, " la presión forja al diamante" y después de muchísimo trabajo interior, hoy recuerdo a cada pseudoenemigo con amor y agradecimiento, deseo que también ellos puedan soltar esa mochila pesada cuando descubran que todos somos actores de esta gran dual virtualidad.... y que en realidad TODOS somos UNO... llegados a este punto... cómo seguir odiándonos a nosotros mismos?

Invito a todos nuestros ciberamigos a que aprovechen estos meses hasta las fiestas decembrinas para masticar estos conceptos, anímense a mirarse desnudos al espejo (no somos tan buenos, ni ellos tan malos) pónganse en la piel del otro... acepten sus propias sombras, perdónense a si mismos por no ser lo que creían ser, ámense así como son y empiecen a trabajar, a reforzarse donde se saben débiles...y entonces sí van a poder perdonar de verdad a los demás.
¿Cómo tomaremos las cosas buenas que vendrán si tenemos las manos ocupadas cargando esta mochila?
¿Cómo volar con tanto peso?
¡Soltemos el pasado! Las cosas que no perdonamos acumulan vibraciones negativas en nuestro cuerpo físico provocando enfermedades. ¡El rencor genera cáncer!
Propongámonos iniciar el año nuevo sin pesadas cargas, sin ficticios enemigos, sin deudas pendientes para que junto al año que nace, renazcamos también nosotros como hombres y mujeres de una nueva raza, íntegra, sabia y más humana.
Existen diferentes herramientas muy eficientes a nuestra disposición (Ho`ponopono- Meditación para tal fin- Técnicas de respiración conciente- Reiki- Cirugías psíquicas- Constelaciones familiares- Hipnosis- Flores de Bach- EFT- PNL- Reflexología holística- Osteopatía- Técnicas de visualización creativa- Terapias regresivas. Apertura de registros akáshicos- etc etc etc) Elijan la herramienta que les resulte más acorde a su personalidad y emprendan el camino del perdón si es que quieren llegar a la libertad y felicidad verdaderas.
No es necesario involucrar a ningún tercero, ésto es un trabajo personal, interior.
Aclaración fundamental: perdonar no significa mantenerse en contacto con personajes nocivos, pero sí perdonar la actuación de esos personajes, y decirles adiós con gratitud, para luego poder recordar sin dolor. Esto es importante aclararlo porque existe una gran diferencia entre el perdón y el masoquismo ( enmascarado  como bondad en la mayoría de las religiones).

Diciembre es el mes de las resoluciones kármicas, aprovechémoslo recordando que " tu único enemigo está dentro tuyo"